En Italia nunca se sabe qué puede pasar en un partido contra un equipo ya descendido, muchas veces resulta (contra la lógica) muy difícil, pero esta vez el Milan visitó a un equipo que claramente demostró por qué se fue al descenso.
PESCARA – Los locales mostraron todos sus límites técnicos y de actitud ante un Milan un poco mejor que el visto frente al Torino. El Pescara nunca puso en peligro a su rival y cada vez que intentaba hacer algo mandaba la pelota directo a las manos de Abbiati o al lateral por su falta de precisión.
BALOTELLI – A diferencia del último partido, Mario Balotelli estuvo activo y participativo durante todo el partido. Abrió el marcador con un penal y cerró la goleada 4-0 con un gran gol, llegando así a 11 anotaciones en esta media temporada con el Milan.
INDIVIDUALIDADES – Abbiati y los centrales (Yepes y Zapata) tuvieron poco trabajo. Abate y Constant tuvieron un muy bien desempeño defendiendo y atacando con bastante frecuencia. Muntari anotó un muy buen gol y mostró gran precisión en los pelotazos largos, aunque se durmió varias veces con el balón en zonas peligrosas. Flamini anotó un gol (el cuarto de la temporada) y jugó un más que aceptable partido. Nocerino falló casi todos los pases y su aporte fue escaso. Parecido a lo de Robinho, que al menos dio la asistencia a Flamini y a Muntari. Niang nunca más volvió a ser el jugador de sus primeros partidos.
CAMBIOS – En el segundo tiempo entraron Traoré, que con los límites mostrados prácticamente selló su permanencia en el Milan, Pazzini que algo intentó (pero ya no se jugaba muy en serio con el partido estando liquidado), y El Shaarawy que evidenció el pésimo momento que vive fallando en casi todos los intentos que hacía de jugar o participar en la maniobra.
Quedan solo dos partidos y el Milan necesita solo 3 puntos para lograr el objetivo de esta temporada: ser tercero y clasificar a la próxima Champions League.